En ponerse metas y alcanzarlas, ya sean empresariales, una dieta o aprender una nueva habilidad; existen una serie de pasos para llegar desde A a Z, siendo A la posición actual y Z el destino final.
Hace años reflexionaba sobre esta escena de Indiana Jones 3 y para sustentar lo anterior, en la película se exponen varios pasos esenciales para llegar al destino.
Si no ha visto la película, véala por favor, es buenísima y acá va el spoiler. Indiana se encuentra con su papá quien tienen el mapa sobre cómo llegar al Santo Grial, dícese de la copa que uso José Manuel en la última cena.
Usan el mapa para llegar al punto y en el mapa (que es un librito), están las instrucciones sobre cómo superar los obstáculos para alcanzar la meta. Llegar al sitio tuvo retos pero no parecidos a los del momento de cruzar los obstáculos, porque ahí Indi es forzado a cruzar y para colmo, tiene un límite de tiempo.
El primer obstáculo trata sobre arrodillarse ante "la presencia divina", porque quienes habían llegado antes, todos estaban sin cabeza. Enfrentar la vida de manera exitosa requiere de un grado de humildad, saber agachar la cabeza sino te la mocharan, pero tampoco es quedarse de rodillas o con la cabeza agachada porque también te matarán.
La presencia no te pide, pero si sabes dar gracias o dar una leve plegaria eso es suficiente. Otro punto es quitarse las telarañas de la cabeza, estas que te dicen que no se puede o no eres capas, esas telas no dejan ver o nublan la vista física y mental.
El segundo reto es pisar el nombre de Jehova, pero este tiene una escritura particular. Se trata de seguir los pasos que otros han realizado, sea el camino a adelgazar, construir una empresa, una familia, dejar una adicción, todas las anteriores alguien lo ha hecho y ha dejado sus enseñanzas sobre cómo pisar el camino. Al reinventar la rueda, buscar tu propio camino puedes perderte, nunca avanzar o retrasar el proceso.
La tercera es el acto de fe, cruzar el camino invisible donde muchos caen porque no tienen un plan o están cegados por las telarañas de dolor, arrogancia o soberbia. Y si pierdo? y si fallo? que tal nunca llegue a mi destino? Perder al no intentar, no arriesgarse. Perder al sólo querer ver el vacío. Perder al no llegar al destino porque se está cegado que el destino es lo non plus ultra. En esta parte se puede aplicar la ley de la suficiencia; siempre diste tu mejor y eso es suficiente, sentir la alegría de por lo más lo intenté, me arriesgué y puedo volver a comenzar en esta u otra vida. Algo parecido a lo que le ocurren a los participantes de American Ninja Warrior, muchos se sienten contentos de haber tomado el reto y eso para ellos es perfecto.
Acá hay que agregar otro tema y el equilibrio. La frase célebre de Nietzche: cuando miras largo tiempo a un abismo, este también mira dentro de ti (y agregando las palabras de Maniac de Mayhem: y luego encuentras que yo soy Dios y soy tu laberinto). Caminar sobre un abismo da tucutucu como diría mi mamá. El miedo puede agarrarte y tumbarte, por eso el tener la vista sobre la meta.
Jordan Belford cometa que cuando estaba aprendiendo a pilotear helicóptero, el capitán le apagaba el motor y la máquina empieza a caer. Cuando se llega a una determinada altura el piloto debe halar la palanca y con el impulso que la nave lleva el helicóptero tendrá un aterrizaje seguro versus irse de jeta contra el planeta. La teoría suena sencilla, y la práctica requiere de valor y más cuando se tiene un posible piso para colisionar. El piloto debe mantener la vista en el horizonte, eso lo salvará.
El cuarto paso que no aparece en el video de arriba es elegir la sencillez, no siempre el regalo más caro es el mejor, ni la mayor decoración la más elegante. Menos es más, y en este caso, tratando sobre un maestro, él compartió la última cena con su arte que era la carpintería y algo vivo como la madera. No quiero decir que el oro no esté vivo, su frecuencia y vibración es más lenta a la de madera que era de un árbol que respiraba.
La quinta enseñanza, que no aparece el título de este escrito; dejar ir. Cuando el grial se cae por las ranuras, la ambición ciega y puedes perder la vida por no saber soltar. Y he pensado mucho sobre este tema, soltar, dejar ir; y me parece gracioso que me encuentre acá con el tema que luego comentaré.
Mientras tanto, parte del regalo de dejar ir es sentir la suficiencia. Ya crucé todas los anteriores reto y estoy cerca de mi Z, la meta, y quizás Z no es llevarme el Grial a casa o a un museo, es un aprendizaje, un regalo intangible, saber que tengo el premio en mi alma la cual me llevaré cuando abandone este cuerpo. Quizás Z es llegar hasta M u otra letra, lo importante es sentir paz.
Enseñanza bonus. Pensando en el punto uno, recordé la película PK, una producción sencilla llena, llenita de enseñanzas y bien controversial para alguno porque... Mejor vean la película y saquen sus conclusiones, no es mi labor llover sobre mojado.
Ya para finalizar, aclaro que no No poseo los derechos de ninguno de los videos acá expuestos, los tomé prestados de You Tube donde alguien también los tomó prestados. Si al tener los videos acá tomados como referencia, me avisan y serán retirados.