de cuarenta bolsas de café y por lo general en grano.
Como comenté en el apartado intitulado Café dentro de la publicación Pendiente dos, coleccioné bolsas de café desde 2019 hasta la fecha, cuando Annia Carolina me regaló una bolsa de Catación Pública, el cual no he vuelto a probar.
Saboreando esta bebida, pasé por los básicos como Sello Rojo y Águila Roja para confirmar que este último es muy malo. En casa y por lo general, el café de la mañana se toma con canela y clavo.
Buscando ese sabor ultra especial, por un rato estuve casado con Tostoa molido, una mezcla del empaque negro y el rojo, o solamente el negro y éste era de lo mejor. La marca cambióp de dueño y pasé a Matiz de color cobre porque, si doy con la temperatura adecuada, la mezcla es casi achocolatada y es un éxtasis al paladar.
Traté de cambiar a Lukafé pero es muy oscuro para mi gusto. Mesa de los Santos lo coloco en esta lista, pero esta es una marca premium.
Hay marcas que tienen mejor sabor en la cafetería que en la casa. Pero hay otros que en definitiva, son de lo mejor y saben super especial. El primero que aparece abajo, Vivos café fue un regalo porque estuvo guardado un año y Elsy no lo había tomado. Dulce, rubio, tostión media.
9.30 me encantó el empaque y el sabor fue de lo mejor. La atención que recibimos en el local en Nuestro Bogotá ayudó a que comprara dos bolsas.
Este café es de Rivera - Huila... si recuerdo bien. Fue sugerido por un conductor de Uber y la primera compra fue especial, pero para la segunda vez, la señora dañó la venta haciendo el proceso bastante engorroso y tristemente, el envío subió mucho el precio.
Tanto Kaldivia como Amor Perfecto fueron por una excelente venta y en el caso de Amor Perfecto, el sabor fue intenso y una fiesta en la lengua. Lo mismo que Tío Oso, de la marca Tío Cangrejo. Aunque lo comercializan para una preparación en frío, el sabor es ultra premium.
Así como Colombia Exotic, sabía a cereza y dilaté hasta donde más pude acabar con el contenido de la bolsa.
Pergamino fue un regalo de Johanna Patricia y la verdad, no recuerdo cuál fue el que más me gustó.
He comprado varios en Varietale y se necesita de presupuesto para gozar de todas las variedades que ellos ofrecen.
Caficosta verde fue mejor que el amarillo.
Crepes sabe lo que hace, no hay mucho que comentar.
Bouvá lo referencié previamente. Aunque fue tostión media, sabía a tostión alta y en prensa italiana, cobra mucho cuerpo.
Pero como comentaba. Hay cafés que cuando lo compras en la tienda, tienen el mejor sabor pero en casa yo fallo en algo y no logro sacar lo mejor de ellos.
Estos de abajo no son malos, para nada. Pero no los coloco como lo mejor del mundo mundial.
Con Starbuks, este de Kenia fue mejor que el de Sumatra. Me parecieron muy tostados y ese detalle le quita la gracia.
Siento que me vendieron un café viejo, en la tienda me encantó o quizás fue una compra compulsiva.
Este fue comprado en la calle del centro de Bogotá un domingo mientras le hacía un recorrido por videocámara a Sandra Milena quien estaba en Chicago. El empaque fue genérico y el sabor agradable.
Me he ido reconciliando con Juan Valdez, por lo general la marca me ha parecido muy tostada. El sabor colina tiene unas notas a durazno que son bellas.
No pude dar con el sabor.
La Divisa lo conocí en el club Metropólitan, tenían ellos el empaque verde y me encantó. Probé los otros dos sabores y no supe aprovecharlo.
Con Café Quindío no he podido acertar. Son buenos pero ni idea qué estoy haciendo mal.
Efímero es especial, es de banda de rock Ennui quienes ofrecen un producto el cual comprarás de manera recurrente, a diferencia de un disco el cual sólo se compra una vez.
Este un café relajante, no produce sueño ni quedarás lelo, pero si es costoso.
No me pareció una chimba, muy tostado.
Este café lo compré en Palomino, me pareció fuerte pero por lo menos es decente versus uno que probé en el Dorado - Meta, ese café era ceniza.
Y como ha pasado tiempo desde la compra a crear esta publicación, apenas pruebe uno debería yo crear una reseña y profundizar en la experiencia para ver si en algún momento me vuelvo catador. Aparte de no tener yo una máquina expreso, tampoco tengo un termómetro y así estandarizar el dar con sabores especiales.
En una futura publicación comentaré los métodos que uso para saborear cada bolsa nueva que llega a la casa.
Café Vol.0 - Black Metal Black Coffee
Café Vol.1 - Un día Kaldivia llegó
Café Vol.2 - Cat Coffee
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